Frágil
Cuando la soga se rompa
caeré al fondo,
cuando el cristal se quiebre
me hundiré sin remedio.
Pero el vidrio partido
no cede de un golpe,
aguanta crujiendo
quizá un largo tiempo.
Hasta el diamante se parte
como una delgada lámina,
aún el acero se funde
blanda arcilla maleable.
Cuando la superficie ceda
no habrá más salida,
cuando la grieta se abra
me ahogaré en lo profundo.
Pero mientras resista, es mi deber,
y casi una prueba de humanidad,
no caer, no hundirme, no ceder
el precario equilibrio sobre el hielo.
3 comentarios:
Este es tu mejor poema, Clau, y sabés que no soy de leer poesía, pero este me encanta releerlo. Sos una grande!
Este es tu mejor poema, Clau, y sabés que no soy de leer poesía, pero este me encanta releerlo. Sos una grande!
Sí, que un hombre te lea una poesía es un esfuerzo monumental... en serio, no es feminismo, por eso te agradezco tu comentario porque es sincero y me alegra que te guste, yo escribo básicamente para mí, pero creo fundamental publicar y sin alguien que lo lea carece de sentido. Te mando un abrazo gigantesco, espero verte pronto, Clau!
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